Tarde de azúcar y letras

La asociación de mujeres Ada Byron, de Torrejón de Ardoz, celebró ayer el acto de entrega de premios de su VII Certamen Literario y IV Concurso de Repostería, evento al que fue invitado José Antonio Fernández, gerente de Grupo Hostal, como miembro del jurado en la competición culinaria.

Tras la presentación del libro de poesía “Amor sin medida”, firmado por Francisco Cerro Ramos, las ganadoras de ambos certámenes recogieron sus premios de manos de miembros de la corporación local y los asistentes disfrutaron del magnífico relato corto de Pilar Pozo Barberá y de los postres que optaban al premio.

Tras varios años apostando por las letras y la pintura, la asociación se dio cuenta del filón de la repostería porque, en palabras de su Presidenta, Ana María Arespacochaga, “es una actividad que se hace con mucho cariño y fervor y que despierta mucho interés entre hombres y mujeres, especialmente jóvenes”.

“Ese interés ha ido in crescendo año tras año y se ha disparado en esta última edición gracias a la impagable ayuda de Facebook”, explica Arespacochaga. Así, una docena de deliciosos y sorprendentes platos, muchos de ellos decorados con la técnica de moda en decoración de tartas, el fondant, pasaron por la cuchara, el paladar y la vista de los dos miembros del jurado: Maya, gerente de la tienda de repostería creativa “El Gato con Cupcakes” y José Antonio Fernández (GrupoHostal).

“Ha habido unanimidad en el veredicto por presentación, sabor y contundencia”, afirma J. A. Fernández, quien destaca la evolución de los platos presentados a concurso año tras año.

¿Y la ganadora fue…? 

Una original y elegantísima tarta con forma de caja de zapatos de fiesta, fruto del trabajo y la imaginación de Marisa López, quien tuvo a bien desvelarnos el secreto de su creación: “Está hecha con un bizcocho rojo que lleva un poquito de chocolate, pero resulta más suave que el bizcocho tradicional de chocolate y es muy vistoso por su color rojo. Lleva también trufa de chocolate blanco en dos capas y está forrada en crema de mantequilla y pasta de azúcar.”

Precisamente esta técnica culinaria ha sido la gran protagonista del concurso, con increíbles figuras de abejas sobrevolando su manjar, traviesos ratones devorando un queso o delicias de azúcar en el fondo del mar. Maya nos explica la diferencia con la repostería tradicional: “Estas tartas están decoradas con pasta de azúcar, cuyo sabor es muy similar, tan sólo varía un poco dependiendo de la marca elegida. Con lo cual es en el bizcocho y las cremas dónde está la diferencia de sabores. Las raciones de estas tartas son muy pequeñas en comparación con las tradicionales, porque este tipo de postres son más pesados que las tartas a las que estamos acostumbrados”.

Para perfeccionar su técnica o iniciarse en otra de estas dulces artes, la Asociación premió a la ganadora con un taller gratuito en la tienda que regenta Maya y al resto de participantes con descuentos para que puedan experimentar con nuevos sabores y probar suerte en la próxima edición.

Y nosotros esperamos volver a estar allí para dar buena cuenta de ellos.